lunes, 3 de diciembre de 2007

Cocido y violencia en Camarenilla

Estaba yo el jueves pasado comiendo tan ricamente con unos compañeros en la Finca Valdespinos, en el pueblo toledano de Camarenilla, poniéndonos hasta las trancas de cocido y migas, cuando fuímos testigos de hechos que nos estremecieron hasta los tuétanos.

Como decía, estabamos nosotros comiendo tranquilamente, cuando de pronto oímos dos tremendos golpes en la puerta del comedor. Un momento después un individuo sudamericano, bien trajeado, apareció corriendo y gritando:

- ¡Llamen a la policía! ¡Nos atracan! ¡Nos van a matar a todos!

En ese momento algunos pensaron que es venía a avisarnos porque nos iban a atracar a los que estabamos en el comedor. A mí no se me ocurrió, la verdad. Pero el tío continuaba:

- ¡Tienen secuestrada a mi mujer y mi hija! ¡Que alguien haga algo!

Y salió corriendo seguido por un grupillo de los que estaban en el comedor. Yo, me quedé sentado, tan ricamente porque, pensé, esa gente que atraca no es buena. A ver si vamos, con la tontería, a tener una desgracia. Yo soy una persona con mucho que perder: vivo con una mujer a la que quiero y que me quiere, soy funcionario fijo del grupo A, tengo un coche pagado y una casa a medio pagar... A buscar aventuras que vayan los interinos y los que trabajan en la privada que, al fin y al cabo, para la vida que llevan...

Pues eso, que yo me quedé en el comedor y al cabo de un rato los aventureros comenzaron a volver. Nos contaron que cuando llegaron al aparcamiento, los atracadores habían salido corriendo con su coche. Un par de personas habían cogido la matrícula. Al parecer a la mujer y a la hija no les había pasado nada, lo único que a la mujer le habían quitado los papeles.

A partir de ahí empezó la rumorología. Se habló de un ajuste de cuentas porque una cocinera había salido cuando empezó el jaleo y los atracadores la apuntaron con una pistola y la dijeron que volviera dentro o se la cargaban. Se añadió a lo del ajuste de cuentas que era por un tema de protitución, al parecer por la pinta que tenía la supuesta mujer (?). El "experto" era un chaval que hablaba de la prostitución con mucho conocimiento de causa. Quizá ha pasado un par de veces en coche por delante del "Conejo de la Suerte". Al fin y al cabo, el otro día vi en la tele a un tipo que decía que sabía que Eva Sanum continúa enamorada del "Prínzipe" porque él se ha cepillado a un montón de danesas y suecas. Otros eran partidarios de que el tipo era un gancho, para que la gente llamara a la Policía y medir cuanto tiempo tardaban en llegar allí, con vistas a un posible atraco futuro a todos los clientes del restaurante. El remate fue cuando alguien comentó, espero que en broma, que él había pensado que nos había invadido el ejército venezolano, por lo de Chávez y el Rey.

Un cuarto de hora o veinte minutos más tarde apareció la Benemérita y el "experto" se fue hacia ellos raudo cual cohete. Hablaron con alguna gente. Dieron una vuelta y se largaron. Y así hicimos nosotros: de vuelta a la civilización. Atrás quedó el episodio más emocionante de la semana pasada. Por eso os lo cuento. Lo del sexo tántrico tendrá que esperar a otro día.

Por cierto: muy ricos, tanto el cocido como las migas.

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Un "pos" que tiene de todo, aventuras, gastronomía, "espertos"..Anda que no os lo pasáis bien..
Que sepáis que el Sábado vamos a ir a vuestra ciudad imperial, por lo que si no estáis en alguno de vuestros viajes "gastronómico-violentos" podrìamos quedar en alguna venta del lugar para gozar de las viandas que nos ofrezcan y departir sobre el buen gobierno de esta nación de naciones..

Anónimo dijo...

Jo, cuando yo me uno a las aventuras gastronómicas no pasan cosas tan emocionantes... que sepáis que os leo, que me gusta como quedan mis fotos en vuestro blog, y que qué susto, po dios, atracos y todo... qué vida más interesante...

Meteorismo galáctico dijo...

Jajaja, me dejas anonadado con las peligrosas peripecias que has narrado. Tu cobardía es sólo comparable (además de a la mía y a la de Antares) a tu glotonería. De haber estado Antares y yo degustando ese cocido con vosotros, a buen seguro hubiésemos salido a la calle a encañonar con nuestros esfínteres anales a los maleantes, no en vano nuestro “diodeno” estaría henchido de los gases del cocido pujando por salir al “esterior” con ostentación.

Jajaja dijo...

Antares,

El sábado hemos quedado para ir a Segóbriga (uno de los parques arqueológicos de Castilla-La Mancha, para los no iniciados). Cuando volvamos os daremos un toque para, si estáis todavía por aquí, tomarnos unos zumos (de uva o cebada, a elegir). De momento os recomiendo que no os perdáis San Juan de los Reyes. En cuanto a comer, en plan “pitiflú” tenéis el Cúrcuma; algo más baratos son la Abadía y la Naviera; la Tabernita es peculiar, ni es puramente de tapas ni puramente restaurante, está bien sobre todo para cenar, pero también hemos comido allí alguna vez. Para tapas no dejéis de pasar por el Ludeña. Por último, un cafetito o un café torero en el Círculo de Arte, una antigua iglesia reconvertida en sala de exposiciones y bar.

Marramiau,

Pues es raro que las veces que hemos estado juntos no te hayas visto envuelta en ninguna aventura. Yo las atraigo como la miel a las moscas: Peligro es mi segundo apellido (¡ah, no, que es López!).

Meteorismo,

No es cobardía, es “istinto” de conservación. Ese es el mecanismo evolutivo que hizo que el velocirraptor ese se “estinguiera” y que el bicho-bola siga por ahí tan campante.

Anónimo dijo...

Jajaja,

Estaremos en Toledo el Sábado, Sabadete(no acabaré esta fácil rima..) y el Domingo in the morning; uséase que nos podremos ver cuando volváis de vuestra "escursión".
¡VIVA BACO!,
¡VIVA LOBEZNO!,
¡VIVA MAGNETO!,
¡VIVA EL SCALEXTRIC!