jueves, 29 de enero de 2009

Los Eólicos

Hace unos quince días el Moirazo (el hermano de Dorami) estuvo “concentrado” todo un fin de semana con su grupo de música, la Bandina Los Eólicos. Se trata de una formación con un repertorio basado fundamentalmente en la música tradicional del Occidente asturiano: jotas, muñeiras, rumbas, polcas… Según él fueron tres días bastante fructíferos y, como prueba, hace unos días nos envió la dirección de la página de Los Eólicos en MySpace, donde tienen colgadas varias de sus composiciones. Como no sé poner un reproductor de MySpace en nuestro blog (no sé incluso si podrá hacerse) os tendréis que conformar con la dirección de su página, por si también vosotros queréis disfrutar de su música y, quien sabe, quizá contratarlos, ya que, como ellos dicen, tienen “un catálogu variau perfectu pa romerías, bodas, bautizos, bail.les ya demás folixa”.

domingo, 25 de enero de 2009

La coronación de Obama

Tras largos días de preparativos y propaganda, en los que dieron la barrila a base de bien con el evento, al que, incluso, algunos avispados sorteaban viajes, por fin llegó el día de la coronación de Obama. Digo coronación y digo bien: eso no fue una toma de posesión; yo soy funcionario, he tomado posesión en tres ocasiones de tres puestos distintos y a mí nunca me han montado nada ni remotamente semejante a ese circo. La última vez mi toma de posesión consistió en que pasé por Personal, apuntaron mi nombre en el margen de un papelote y me dijeron que ya me podía ir, que me mandarían mis papeles por correo interno. Lo mismito que lo de Obama, vamos.

Se decía que dos millones de personas iban a asistir a los distintos actos, la mayor parte al aire libre y con unas temperaturas bajo cero. El que suceda algo así es un síntoma claro de que la gente está muy ilusionada. La situación está muy chunga y hay unos enormes deseos de que las cosas cambien, lo que ha llevado a muchos americanos a depositar todas sus esperanzas en su nuevo presidente. Y no solo los americanos, aquí, en España, por lo que dicen nuestros gobernantes y se escucha en los medios de comunicación, Obama va a resolver todos los problemas del Mundo. Va a pacificar Afganistán, va a conseguir que en Irak haya un gobierno estable, cerrará Guantánamo, pondrá de acuerdo a israelíes y palestinos, acabará con el peligro nuclear en Corea del Norte e Irán, colaborará con los países pobres para que todo niño tenga un pollo en su mesa y un profesor para cada veinte (niños, no pollos), relanzará la economía mundial poniendo fin a la crisis… Me parece que, como dijo el otro día el Gran Wyoming, estamos depositando en el nuevo presidente americano tantas esperanzas como los habitantes de Villar del Río en Mr. Marshall:



El problema es que estamos depositando demasiadas esperanzas en un solo hombre, por muy poderoso que este sea. Un hombre que, además, está limitado por sus obligaciones para con un montón de gente: los primeros, los grandes contribuyentes que le han pagado su campaña; después los votantes americanos, cuyos intereses no tienen porqué coincidir con los del resto del Mundo; las grandes empresas petrolíferas, el complejo industrial-militar norteamericano, el lobby judío de Washington… Al final, me parece que, por muy capaz que sea y por muy buenas intenciones que tenga, Obama va a decepcionar a la mayor parte de la gente. Ya estoy viendo a todos aquellos que le jalean en nuestro país, muchos de ellos antiamericanos furibundos hasta hace cuatro días, dentro de cuatro años como los decepcionados habitantes de Villar del Río:



Quizá lo mejor que le podría pasar al nuevo presidente americano (aunque seguro que él está en desacuerdo conmigo) es que se lo carguen poco después de comenzar su mandato. Como Kennedy, al que le pegaron un tiro y se convirtió en un mito. ¿Quién se acuerda ahora de que fue el responsable del fiasco de Bahía de Cochinos?

Espero equivocarme. De todas formas, el hombre ha entrado con buen pie: desde que es presidente, a mi suegra se le han quitado todos los dolores.

miércoles, 21 de enero de 2009

Adios, Mr. Bush



Para los que no sepan sajón:
HAZ DE AMÉRICA UN LUGAR MEJOR
LÁRGATE DEL PAÍS

Cartel cortesía de Juanma World.

miércoles, 14 de enero de 2009

Cucarachas, enanos y enanos gigantes

El surrealismo es una tendencia artística surgida entre los años 1920 y 1930. Su aparición oficial se concibe en 1924, con la redacción de El Manifiesto Surrealista por el poeta y crítico francés André Breton. Al principio este fue un movimiento literario y filosófico pero los pintores no tardaron en incorporarse a él. Como todo ser humano, los artistas se sintieron frustrados con las pésimas condiciones en que se encontraba Europa a fines de la Primera Guerra Mundial, por lo que su inspiración no la buscaban en la realidad, sino en sus sueños y fantasías. Como es de suponer, la aparición del psicoanálisis de la mano del psicólogo alemán Sigmund Freud, influenció enormemente el desarrollo de esta técnica artística, ya que pone un especial énfasis en el inconsciente del hombre.

El mundo surrealista se puede definir como caótico, absurdo e irracional. Es como la exteriorización de lo interior, sin control racional y sin obstáculos morales o estéticos. Dicho de forma breve: es una forma de olvidarse de la realidad; por algo su significado se deriva de dos raíces griegas: sub, que significa por debajo, y realismo que implica lo que realmente es, o sea, la realidad.


Si habéis leído la obrita del escritor checo Frank Kafka, La Metamorfosis, convendréis conmigo en que es un buen referente para entender, a través de su protagonista, Gregor Samsa una existencia surrealista. Esta obra, publicada en 1915, narra la historia de Gregorio Samsa, un comerciante de telas que vive con su familia a la que él mantiene con su sueldo y que un buen día amanece convertido en una criatura no identificada claramente en ningún momento, pero que tiende a ser reconocida como una especie de cucaracha gigante.

Bueno, pues ésta ha sido una de mis lecturas durante las recientes vacaciones de Navidad en Asturias. La he compaginado con uno de mis libros preferidos: La vida exagerada de Martín Romaña, del escritor peruano Bryce Echenique.


La verdad es que no he podido escoger mejor el acompañamiento literario de esta última estancia en casa de mis padres. Exagerada es mi madre, a la hora de comer (que llegó un momento en que era cualquier hora). Y mi hermano, otro tanto de lo mismo: se pasó todas las vacaciones ensayando la misma canción con su nuevo instrumento, una armónica. Y para surrealista la presencia del “enano”. Me explico: el enano es nuestro vecino de arriba. Es un ser diminuto en estatura, pero grande en maldad. ¡Qué inocente parece cuando va por las calles tocando su armónica y ofreciendo al personal los cestos de mimbre que él mismo fabrica con sus “manecillas”! Ni habla, ni conversa, ni se socializa… Se limita a vocearle a una radio que tiene encendida a volúmenes insoportables para “humanos normales” y a emitir gemidos animales que sólo hace cuando sube las escaleras al piso de arriba (nosotros vivimos en el de abajo) y pasa delante de nuestra puerta. Lo peor de todo esto es que mi madre empezó contestándole con un sonido más o menos similar (por eso de picar al enano) y luego terminamos todos (incluido Jajaja) soltando todo el día graznidos. Llego un momento en que todo me pareció exagerado y surrealista, hasta tal punto que una noche soñé que mi hermano se convertía en una especie de “enano gigante” que graznaba y que vivía de tocar la armónica y hacer cestos de mimbre… Qué raro es todo.

viernes, 9 de enero de 2009

John Connolly: Novela negra con toques sobrenaturales

Lo primero de todo, desearos feliz año. Sí, ya sé que llevamos bastantes días de este 2009 pero, como dicen en Gálvez: “Hasta San Antón, Pascuas son”.

Tras unas Nochebuena y Nochevieja en familia en Madrid y unos días en Asturias con Dorami y su familia, volvemos al duro trabajo y a la ardua labor de mantener Castilla-La Monda en la punta de lanza de la necedad mundial. Mi estancia en Asturias, entre el largo viaje en autobús y esas gélidas tardes-noches, me ha dejado bastante tiempo para leer por lo que, previsoramente, me llevé un par de libros que Marramiaú me dejó la vez que estuvieron visitándonos en Toledo. Se trata de dos libros del escritor irlandés John Connolly al que conozco, precisamente, porque fue ella quien me lo recomendó. Son las últimas novelas que ha escrito de la serie del detective Charlie “Bird” Parker. Como Marramiaú está totalmente enganchada a esta serie, no pudo esperar a que salieran en cristiano, así que se las compró en el idioma de “Sespir”. Yo leo bastante fluidamente en inglés pero, lógicamente, me cuesta bastante más esfuerzo que en español, así que me daba pereza ponerme con ellas. Estas Navidades han sido el momento para leerlas.

El personaje principal de la serie es un detective privado, el ya mencionado Charlie Parker, un hombre torturado por los remordimientos por no haber podido evitar las muertes de su mujer y su hija, asesinadas por un maniaco. La serie se mueve en general dentro de los parámetros de la novela negra: asesinatos, desapariciones, casos de abuso de menores… en los que el protagonista se ve envuelto en parte por casualidad, en parte por un impulso justiciero atizado por el asesinato de su familia. Lo que hace peculiares a estas novelas es el toque sobrenatural que flota sobre todas ellas: espíritus, videntes, ángeles y demonios… En la mayor parte de los casos este elemento es solo secundario en la trama, pero en algún caso, como en la novela “El ángel negro”, es el elemento principal. Precisamente, relacionado con esta novela, he encontrado este vídeo en YouTube en el que John Connolly nos guía en una visita turística a un lugar fundamental en la trama, el Osario de Sedlec, en la República Checa. Un sitio que, por la pinta, merece la pena visitar.



En ocasiones se ha acusado a este escritor de recrearse excesivamente en la narración de escenas violentas. También se dice que algunas veces decae el ritmo de la narración. Esto sí me parece cierto, Connolly parece excesivamente aficionado a ponerse a reflexionar sobre la oscuridad de la vida y la maldad del ser humano, en vez de dejar sus opiniones de manifiesto simplemente con el desarrollo de la trama.

De todas formas es una lectura bastante recomendable, si en vosotros se aúna el gusto por la novela negra y el género fantástico, como es mi caso. Aquí os dejo la página del autor en Tusquets Editores, que es la casa que publica sus novelas en España.